Más que amigos (EXO FanFic): #7 Razones (Kai)

Estábamos ensayando, cosa que ya era una rutina para nosotros. Creía estar en mi límite, como si en cualquier momento fuera a colapsar, pero no sucedía. No sabía si estaba feliz o triste con por esto. Por una parte ya no tenía ganas de seguir, pero por otra estaba mi sueño desde pequeño y seguía intentándolo sin darme cuenta.

Para hacer más ameno mi ensayo me la pasé pegado a Sehun compartiendo chistes. Si, los papeles se habían invertido. Ahora era yo quién estaba detrás de él. Antes pensaba que si me dejaba tranquilo, aunque fuera un segundo, sería la persona más feliz de la tierra, pero ese sentimiento comenzó a cambiar y ahora soy yo quién lo necesita y de esto me había dado cuenta hace sólo un año, un poco antes de que el chino llegara. Él era la única persona de mi edad, así que en Sehun encontré a una especie de amigo. Alguien que me escuchaba por muy estúpido o sin importancia que fuera lo que dijera, alguien que no me dejaba tranquilo ni para ir al baño. Era demasiado dependiente, pero con el tiempo su compañía me llegó a acostumbrar y hasta la necesitaba, en especial cuando esa otra persona apareció.

Me reventaba que Sehun hablara tanto con Lu Han, y ahora lo puedo admitir, estaba celoso de él, razón por la que lo molestaba siempre. Pero luego comenzé a notar algunas cosas. Ya no me eran ajenas aquellas miradas que se dedicaban con las que se podían decir miles de historias, de pensamientos. También notaba como Sehun sonreía cuando este lo hacía, lo sabía, porque yo también lo había vivido y me enojaba que lo de ellos fuera mutuo –o al menos de eso estaba casi seguro, el chino sabía ocultarlo muy bien-.

Él había llegado y me había quitado a mi cachorro, así era como lo llamaba de cariño porque él era eso para mí. Un amigo en el que podía confiar siempre, que siempre estaba allí detrás de mí para apoyarme, aquel que me daba alegrías, pero que si no está a mi lado me hacía sentir incompleto.

¿No era razón suficiente para explicar mis actos?

Lu Han nunca me había hecho nada, nada de lo que él se diera cuenta. Él me quito lo que más apreciaba, mi único amigo, y ahora era el suyo. Sabía que para Sehun aún era un amigo más, pero ya no era lo mismo… y el no se daba cuenta. Era tan inocente, que yo hasta se lo gritaba en la cara.

“Te quiero, idiota”

Pero seguía ignorándolo.

¿Alguna vez lo sabrá? ¿Se dará cuenta?

Mi amor es bruto, pero al fin al cabo es amor…

Ahora, sabiendo que ya no lo tengo me divierto viendo sufrir a Lu Han. Soy cruel, lo sé, pero no me gustan que me hagan daño y quiero que él sienta lo que yo alguna vez sentí.

Egoísta, si, lo sé, pero no puedo evitarlo. Puedo ser un poco terco a veces…

….bien, MUY terco siempre.

─¡Hunnie! –lo llamé estirando mis brazos, pero él me ignoró. Se preocupaba de alguien más.

─¡Oye! ¡Te estoy hablando! ¡Tierra llamando a Sehun! ¡Aló! ¿Me captan ahí adentro?

Escuché las risas de Baekhyun con D.O. en la esquina de la sala.

─Lo siento, ¿Qué decías? ─se disculpó moviendo su cabeza como negando rápidamente, alejando esos pensamientos que le tenían la mente ocupada.

“Un cachorro…”

─¡Ayúdame a pararme! ─le estiré los brazos otra vez. El sonrió y me ayudo.

─Chicos, acérquense ─nos llamó el manager para conversar sobre la agenta que teníamos los siguientes días.

Sehun se apresuró a ir, pero yo lo detuve atrapándolo con mis brazos por su cintura, en otras palabras, lo abrasé por detrás y le susurré en el oído:

─No me dejes.

Sehun rió, ya estaba acostumbrado a mí actuar y lo tomaba como sólo amistad, sólo un juego… pero yo no.

Pude notar como Lu Han nos observaba y sonreí para mí mismo. Este juego era divertido.

Al acercarnos más a lo demás Suho me llamó la atención, ya que seguía diciéndole cosas al oído a Sehun y este sonreía distrayéndose. Al final me separó de él jalándome de un brazo y me miró seriamente dejándome a su lado sin dejar moverme.

No sé por qué, pero me divierte cuando el líder me reta… nunca lo hace ─al menos nunca por más de un minuto─, y lo había provocado muchas veces pero al final no funcionaba… bueno, hasta la vez del ensayo con Lu Han. Ahora era como si cualquier pequeña cosa que hiciese le afectara en demasía y me regañaba.