Más que amigos (EXO FanFic): #13 Después de la pelea (Lu Han)

La furia me abordó y nubló mi consciencia por completo. Las palabras de Kai taladraban mi mente como si fuera una ametralladora incesante. Mis puños se cerraron y supuse que mis nudillos estaban blancos por la fuerza. Intenté detenerlos con todas mis fuerzas pero sentí unas manos asirme por el brazo y otras deteniéndome por la cintura. Por mucho que pataleara y les gritara que me liberaran, no me dejaron ir. Me retuvieron hasta pasados unos diez minutos, los que fueron interminables. Las ganas de correr en su búsqueda me quemaban por dentro y me hacían perder los estribos de vez en cuando, y liberaba esa rabia dando patadas a los objetos cercanos por lo que gané más de un regaño de SuHo al que fulminé con la mirada y permaneció en silencio. Por mucho que fuera el líder aún me tenía respeto por ser su hyung.
En esos eternos minutos en que me calmaba Yixing intentaba aminorar mi furia con sínicas palabras de comprensión de las que me reía en su cara. La discusión con él fue en chino y los demás miembros nos miraban preocupados sin moverse lo más mínimo temiendo que aquello me hiciera reaccionar. Ellos no tenían la culpa.


─Él te gusta ─dijo Yixing en un chino susurrante -temiendo que alguno lo fuera a entender- luego de que le gritara algo sin sentido en mi estado de cólera. Mi reacción fue de total sorpresa. Evité su mirada y me voltee en la dirección contraria, y esquivando con eso la respuesta que no quería admitir.

“¿Tan obvio era? No, debe ser que él es demasiado observador”.

─¿Es eso la causa de todo este problema? ─me incriminó el chino poniéndose de pie y acercándose a mí.

─No.

─No me mientas, gege.

Observé el piso y sentí la sangre subir a mi cabeza. Bien, supongo ya no podía negarlo.

─Deberías explicarle las cosas al chico ─se me dirigió Lay evitando el nombre del maknae para que los demás miembros no lo reconocieran.

─No quiere escucharme, Yixing, ¿qué quieres que haga? ¿Qué lo amarre para que me preste atención? Eso lo dejaría más traumado de lo que está ─exasperé y el aludido me miró con tristeza. Las cosas se volvían tan complicadas con un adolescente.

─Él te quiere ─escuché la voz de Minseok, quién se acercaba a nosotros que nos habíamos alejado cada vez más hacia la cocina por privacidad, algo que los miembros agradecieron ya que el ambiente estaba demasiado tenso con nosotros alrededor.

“El me quiere, sí, claro”.

Pensé irónico para mis adentros y una torcida sonrisa se dibujó en mi rostro cuando bajé la vista a mis zapatos. Jugué con ellos nerviosamente sin decir nada por unos minutos hasta que la pregunta que rondaba mi cabeza en ese momento se escapó de mis labios como un suave y esperanzado susurro, casi como una súplica.

─¿Cómo puedes estar seguro?

Xiu Min me miró como un hermano mayor mira al menor. Supongo que mi aspecto volvió a parecer el de un niño de seis años buscando respuestas, que aunque fueran ilusorias acallaban sus deseos.

─Se le nota. No hubiera reaccionado de esa forma si no fuera porque te quiere. No hubiera detenido a Jongin si no se preocupara por ti. Simple, para él tú eres importante, Lu Han.

Lo miré, pero su respuesta me parecía tan imposible de creer que no la acepté. Negué furiosamente desbarajando todas esas ideas, como si así desaparecieran por completo.

─Eso no es verdad. Él no me quiere. Lo decepcioné por completo. Él me odia, Minseok, él me odia ─mi voz se fue perdiendo con el correr de las palabras y una lágrima se deslizó por mi mejilla sin advertirlo. Me sostuve en el mesón y sentí al mayor darme palmadas en la espalda.

─Ven aquí ─me volteó y me apretó fuertemente contra su cuerpo.

Al menos sabía que aún había gente a mi alrededor que me apreciaba, o al menos que me tenía lástima.
Miré a Yixing quién estaba recargado contra la pared mirándonos en silencio y le hice una seña para que se acercara y así terminamos el abrazo entre los tres. Lay desordenó mi cabello y me obsequió una sonrisa.

─Ya verás como todo esto se soluciona.

─Si, Sehun es un blandulón. No durará mucho.

Minseok me sacó una sonrisa con su comentario y ansié con que aquello fuera cierto, pero mi cabeza me decía que no lo sería, o al menos, no tan próximo como me gustaría que fuese.

─Debo irme ─nos avisó Yixing mirando el reloj colgado en la blanca pared de la cocina─. Tengo ensayo de baile.

Me miró como si me pidiera permiso para irse, le sonreí y asentí con cabeza.

─Ve rápido que se te hace tarde ─le indiqué y este me devolvió la sonrisa.

─Gege, cuídalo bien. De repente se comporta como de seis, pero no te preocupes que es normal ─bromeó el chico causando que el aludido riera y me observara tiernamente.

─Claro que lo haré.

El menor se disponía a irse, pero se detuvo en el umbral y se giró en mi dirección.

─A todo esto… ustedes harían una linda pareja.

Minseok rió a mi espalda y distinguí las miradas cómplices que esos dos se daban; era un pésimo mentiroso al parecer.